martes, 28 de julio de 2009

HELP

Necesito ayuda. Deseo hacer lo siguiente en un blog:

Que cada entrada publicada no se lea completa en la página principal (lo que sería la portada del blog), quisiera que se leyera el título, algo del texto y que diga "para continuar leyendo de click aquí" o "más información". He visto que es posible, pero no se hacerlo y me urge porque es para mi trabajo.
Saludos.

viernes, 24 de julio de 2009

Manos a la obra (o los discos de mi viaje)

Cuando visité el sur de mi país la música fue (como siempre) indispensable. Pero ese viaje necesitó de música “especial” porque fue un viaje ESPECIAL. Lo difícil fue llenar, o al menos intentar, un ipod de 120 gigas; claro, una peli y discos, muchos discos.

Pocas semanas antes había salido el nuevo álbum de Bebe titulado Y. (léase “y punto”), un disco de viaje, de interior. También semanas antes había descubierto a Love of Lesbian, un grupo de indie, con 1999, un disco de años importantes, de personas importantes, de continuidad.

Y sin lugar a dudas, Y. y 1999 marcaron cada paso, cada día, cada noche de ese viaje. No siguieron ningún orden, se intercalaban según. Pero voy a clasificarlos así:

1999 es el álbum de esa persona, de ese año 2007 que me marcó, de esa felicidad, de los años siguientes de dolor, de tristeza y aún con todo, de amor; de La Relación, que ilusa o no, llenó mi vida; de su carita y su voz de niña, de su cuerpo que tanto me excitaba.

Y. es el álbum de mis instintos, de sacar las garritas y tirar para adelante; de llorar, pero de descararme también, de emborracharme, de reírme de mí, de dejar las penas y las culpas, de liberarme; de gustarme, de seducirme.

Al llegar a casa lo importante era (y es) no tirar la toalla; no puedo pelear contra lo que siento, pero hay una vida bonita que tengo y voy a vivirla; no tengo claro qué deseo, pero es fácil si en serio quiero saberlo; no quiero cometer los mismos errores, puedo cometer otros sin dañarme ni dañar.

Y lo más importante, en el viaje Will (un compañero de trabajo de origen zapoteco, con el que coincidí) me explicó por qué en su lengua no existe la palabra “amor” o “te quiero”: “porque el amor se demuestra, no hay cómo nombrarlos; no utilizamos el ‘querer’ porque las personas no somos objetos, quieres una casa, un carro…”

Es una concepción extraña a mi forma de pensar, pero razonable y sobre todo hermosa si piensas que la única forma de decir "te amo" es demostrarlo. Descubrí conceptos muy útiles para mi día a día, para mi batalla diaria en un mundo complicado, pero sobre todo descubrí que nadie puede amarme si no me amo yo, cosa básica. Y si no hay más fondo, no queda más que subir y subir...

miércoles, 15 de julio de 2009

En casa

A lo largo de un tiempito cogí mis cosas, me lleve lo básico, recuperé mis institos y mi risa, empecé a vivir de nuevo. Punto 2007. Punto 2009.

viernes, 3 de julio de 2009

ME VOY [o se acabó yo cabrona]

Dos años a prisa, sin pausa, donde he tenido que sumergirme y salir casi sin aliento, donde no ha habido cabida pa respirar en calma, en paz, pa meditar y aceptar que uno se hace grande, que las respuestas quizá nunca tuvieron pregunta.
Llevo viviendo dos años en un mismo año, en un mismo momento, no me he permitido dejar atrás lo que atrás se quedó; no he dejado que el presente se haga, se teja como debe. Dos años que son 2007. Y no, la cosa no debe ir por ahí.
Ahora me siento demasiado asfixiada, estoy muy enojada conmigo misma, con la gente, con el mundo. Todo y todos me joden en algún punto del día. Al despertar en las mañanas el estomago se me revuelve: no estoy agustillo como estoy y algo debo hacer.
He perdido de a poco el sentido del humor, a veces llega, otras veces no; pero lo más grave es que he perdido mis instintos y mi amor por mí, mis sueños, mis metas. No soporto a la gente, a mi familia, a mis amigos, no me soporto ni yo.
Voy muy enredada, de pies y manos. Dos años y mi vida gira entorno a lo que ya no es en muchos aspectos de mi vida y no me lo permitiré más.
Pero necesito reencontrarme conmigo, estar en paz conmigo, sonreirme, reirme de mí, divertirme conmigo; entender que siempre habrá algo que no cambiará sobre cómo te ven los demás, así como siempre habrá algo que no cambiará en cómo veo a los demás. Que así es.
Que el pasado es pasado por más que te haya frito el corazón, la cabeza, los sesos y la pasión; que las etapas se cierran y los círculos sólo son una vez.Me he cansado de sonreir, de decir que estoy bien cuando ni siquiera percibo qué siento. Me he fallado, yo me he fallado y estoy encabronada.
A mí que tanto me gusta la vida sencillita (aunque no lo parezca), filosofar, reirme, estar con la gente que amo y me ama. Así que tomo mis cosas y me voy pa echar de menos a toda esa gente valiosa, pa estar conmigo, reconocerme, salir de la rutina citadina, pa revalorar mi vida, pa coger valor y de nuevo emprender el vuelo.
Me voy para no sentirme asfixiada. Pensaba, primero, llevarme todo y dejarlo allá. Pero no, dejo aquí todo lo malo y lo bueno que me lastima: los rencores, los malos entendidos, la falta de comunicación, mis errores, mis aciertos, el amor y el punto y final...
El destino pocos lo saben, y vaya a saber uno cuál sea el resultado, pero esperanza hay mucha. Me llevo mi musiquita, mis hojas en blanco, mi lápiz, mis niñas. Nos vemos pronto, y espero -de todo corazón- necesitarlos de nuevo cerquita; sentir cosquillas de nuevo, alegrarme por quién soy.
Abrazos a todos.