1- Aparentar no tener problemas e ir a beber una cerveza con los amigos.
2- Después de unas 3 cervezas comienzas a hablar de tus problemas (o antes si eres inexperta).
3- Aquí comienzan las canciones dolidas tipo El Recodo, Intocable y K-paz.
4- A continuación pides otras cervezas dependiendo de tu tolerancia, comienzas a ponerte un poco necia y como tus amigos están igual qué tú pues despotrican en contra de él o la que te hizo algo o que no te hizo. Entonces, comienzas a tomar más rápido las cervezas y empiezas a no sentir las mejillas.
5- Sigue la etapa de valemadrismo, cosas como mándalo a la fregada, etc. Diciendo ese wey está bien feo, tú mereces algo mejor y todos le mientan la madre a ese wey.
6- Viene la etapa donde dices pero es que lo quiero mucho y no se ha portado mal conmigo (digo puede ser que sea con un poco de lagrimas). Los amigos te animan entonces: “no llores”.
7- Llamas a tus amigos que no están ahí diciéndoles que los quieres mucho y no te importa si se acaba el crédito; si no tienes les llamas de otro fon de tus cuates, al fin el crédito no importa; el dinero va y viene pero una noche de mala copa nunca se olvida. Las palabras aquí son: “los amo, y por qué no están aquí, ya los quiero ver, los extraño, etc.”.
8- La música te pone más y más melancólica, tanto que recuerdas los buenos momentos y sobre todo que tienes celular, no te importa la hora, sólo sabes que tienes celular y que puedes todavía ver las letras del directorio.
9- Vas al baño o sales fuera y marcas ese último número. Si contesta comienzas con un “cómo estás “, después de seguro te dice, si te conoce bien, “¿Estás tomando verdad?” y tú dices que “no, para nada, sólo me acordé de ti y te llame”. Escuchas una canción de fondo tipo corta venas y es entonces cuando o le dices: “¿escuchas la canción?” y le empiezas a decir que lo quieres mucho, le recuerdas esos momentos especiales y él se encuentra súper dormido, tanto que no carbura, pero te dice a todo que “sí”. (Esto es bueno porque a lo mejor sólo recordara que le hablaste pero no lo que te dijo y así la cruda moral no será tan grande).
10- Llegas nuevamente con tus amigos y les dices “ya le hable a esa persona”, y todos “¿Qué te dijo?”. Así la vida misma. Y si no te contesta, todos dicen: “pues mándalo a la fregada”. Pero mientras ya hiciste unos 3 intentos de hablarle, obvio marcas y marcas como un desesperado, ves si el móvil tiene señal; casi les quitas a tus amigos el cel y quieres marcar para ver si del otro te contesta. Si no contesta, llegas con los amigos y les dices, entonces “a la fregada y SALUD”.
11- Ahora cantan con más sentimiento y pides y pides más chelas; cuando llega la cuenta empiezas a sacar hasta la morralla y te prestan cinco pesos y dejas de propina sólo tres.
2- Después de unas 3 cervezas comienzas a hablar de tus problemas (o antes si eres inexperta).
3- Aquí comienzan las canciones dolidas tipo El Recodo, Intocable y K-paz.
4- A continuación pides otras cervezas dependiendo de tu tolerancia, comienzas a ponerte un poco necia y como tus amigos están igual qué tú pues despotrican en contra de él o la que te hizo algo o que no te hizo. Entonces, comienzas a tomar más rápido las cervezas y empiezas a no sentir las mejillas.
5- Sigue la etapa de valemadrismo, cosas como mándalo a la fregada, etc. Diciendo ese wey está bien feo, tú mereces algo mejor y todos le mientan la madre a ese wey.
6- Viene la etapa donde dices pero es que lo quiero mucho y no se ha portado mal conmigo (digo puede ser que sea con un poco de lagrimas). Los amigos te animan entonces: “no llores”.
7- Llamas a tus amigos que no están ahí diciéndoles que los quieres mucho y no te importa si se acaba el crédito; si no tienes les llamas de otro fon de tus cuates, al fin el crédito no importa; el dinero va y viene pero una noche de mala copa nunca se olvida. Las palabras aquí son: “los amo, y por qué no están aquí, ya los quiero ver, los extraño, etc.”.
8- La música te pone más y más melancólica, tanto que recuerdas los buenos momentos y sobre todo que tienes celular, no te importa la hora, sólo sabes que tienes celular y que puedes todavía ver las letras del directorio.
9- Vas al baño o sales fuera y marcas ese último número. Si contesta comienzas con un “cómo estás “, después de seguro te dice, si te conoce bien, “¿Estás tomando verdad?” y tú dices que “no, para nada, sólo me acordé de ti y te llame”. Escuchas una canción de fondo tipo corta venas y es entonces cuando o le dices: “¿escuchas la canción?” y le empiezas a decir que lo quieres mucho, le recuerdas esos momentos especiales y él se encuentra súper dormido, tanto que no carbura, pero te dice a todo que “sí”. (Esto es bueno porque a lo mejor sólo recordara que le hablaste pero no lo que te dijo y así la cruda moral no será tan grande).
10- Llegas nuevamente con tus amigos y les dices “ya le hable a esa persona”, y todos “¿Qué te dijo?”. Así la vida misma. Y si no te contesta, todos dicen: “pues mándalo a la fregada”. Pero mientras ya hiciste unos 3 intentos de hablarle, obvio marcas y marcas como un desesperado, ves si el móvil tiene señal; casi les quitas a tus amigos el cel y quieres marcar para ver si del otro te contesta. Si no contesta, llegas con los amigos y les dices, entonces “a la fregada y SALUD”.
11- Ahora cantan con más sentimiento y pides y pides más chelas; cuando llega la cuenta empiezas a sacar hasta la morralla y te prestan cinco pesos y dejas de propina sólo tres.